Conocida por su tranquilidad, historia y paisajes pintorescos, Woodstock es la segunda ciudad más grande de Connecticut en términos de superficie, aunque su población sigue siendo pequeña. Con un origen agrícola, cuenta con más granjas lecheras en funcionamiento que cualquier otra ciudad del estado. Durante su visita, asegúrese de explorar el Museo Roseland Cottage, disfrutar de una cata de vinos en la Bodega Taylor Brooke o dar un emocionante paseo en globo aerostático con Connecticut Voyager Balloons.